Sencillo juego donde debes colocar las cartas en las filas intentando no poner la sexta carta en una fila porque sino toca comer y ganar puntos. El caos típico de este juego hizo que algunas personas que no lo conocían no vieran la estrategia, pero si no la hay!
Al final perdí miserablemente, o sea, de paliza.
No habíamos terminado la partida y llegó Edu, así que después del Toma 6 nos pusimos con el Misterios de la Abadía, un cluedo vitaminado. Maria Antonia dejó su sitio a Edu, como es profesora le tocaba corregir exámenes y redacciones (Ay, estos profesores siempre corrigiendo).
Una breve explicación de reglas (con muchas interrupciones) que dejó algún comentario gracioso como:
Yo explicando: Los monjes tienen diferentes características, la orden religiosa, el rango, gordo o flaco...
Una chica: que?
Otra chica: Si mira, están los templarios, los franciscanos y los BERBERECHOS
Todos: ¡ja ja ja ja ja!
Y así toda la partida jugando con monjes berberechos
Os presento los hermanos Berberechos
Al principio se hace mucho uso de los confesionarios y del Parlatorium para coger cartas, con preguntas poco útiles, costó pillar el truco al juego.
A mediana partida las preguntas eran más interesantes, alguien ya iba al Scriptorium a coger cartas que le pudieran ser útiles, incluso Edu entró en la Biblioteca.
Ya en la fase final empezó una carrera hacia el Capitulum para hacer acusaciones o revelaciones. Marilen llegó a tener descartados a todos los monjes pero se aventuró a acusar, aunque falsamente. Le seguimos Pep y yo ganándonos los tres -2 puntos.
Catina y Edu mientras iban formulando revelaciones, Catina dijo que era gordo y calvo (hizo 2 revelaciones) mientras Edu dijo que era un Berberecho.
Al final Marilen (si, la que tenia todos los monjes tachados) descubrió al asesino, un hermano Berberecho gordo y calvo, así que Catina gano la partida con 4 puntos.
Catina: 4 puntos
Marilen: 2 puntos
Edu: 2 puntos
Pep: -2 puntos
Xisco: -2 puntos
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